Muhammad Ali y la noche que fue troleado por un contendiente argentino
El 7 de diciembre de 1970, Muhammad Ali enfrentó a Óscar Bonavena y una pelea con más color abajo del ring que acción encima de ella.
El más grande llegaba con récord profesional de 58 peleas ganadas, 9 perdidas y 1 empate al compromiso pero la exceptiva estaba por encima, muchos creyeron que su marca podría llegar a la decena de perdidas.
Ringo Bonavena nació un 25 de septiembre de 1942 en la provincia de Buenos Aires, fue ahí donde vio sus primeros días y sus primeros guantes.
La picardía de barrio impregnó rápidamente su personalidad, en consecuencia, sus amigos lo incitaban a boxear. El mismo decía “para los golpes siempre fue muy bueno”.
Oscar Natalio hizo su debut en una arena grande, nada más y nada menos que el Madison Square Garden en la gran manzana. Rápidamente llegaron peleas importantes para él ante tipos como Joe Frazier, incluso le disputó el título mundial.
Muhammad Ali y el memorable momento en la revisión médica
La comisión estaba llevando a cabo los protocolos para asegurar la salud y juntó a ambos en una misma sala, Ali ya era un campeón famoso entre la gente y todos sabían lo bocón que era solo que esta vez no iba ser el quién calentará el ambiente.
Ringo Bonavena también era un tipo pícaro y no de dejó intimidar en su trayectoria. Durante el chequeo las palabra sonaron fuerte. el argentino lo llamaba “Gallina” o Clay -haciendo referencia a su anterior nombre- acción que no cayo en gracia para el campeón. Ali solamente decía “keep talking”.
Al terminar la revisión, Muhammad Ali llamó a Ringo para ponerse frente a frente. Este aceptó.
Ali lanzaba jabs a la distancia intentando mostrar su velocidad, Ringo lo apuntó con el dedo, sin embargo, fue desviado por una mano del campeón.
Al contacto físico Ringo se le abalanzó con un amague y Ali reaccionó brincando hacía atrás con susto y desconcierto. Aquella noche le salió un troll más grande de lo que fue él y quedó evidenciado ante las cámaras.
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