LA RESURRECCIÓN DE ANTONIO ‘TONY’ DEMARCO
A sus 34 años de edad Antonio ‘Tony’ DeMarco acaba de vivir lo que el considera un rejuvenecimiento en su carrera, un nuevo despertar, mucha más motivación, y todo tuvo lugar en lo que fue su último combate el pasado martes 16 de junio.
El mexicano, oriundo de Los Mochis, Sinaloa, vio acción en la velada que Top Rank realizó en lo que ha sido el regreso del boxeo élite, en la ciudad de Las Vegas, en el MGM Grand.
‘Tony’ se tuvo que medir al prospecto welter Giovani Santillan quien era el claro favorito de la noche y se pensaba que podía despachar sin problema alguno al que muchos consideraban ‘el viejo león’ DeMarco.
Pero la situación fue otra y Antonio demostró que puede ser todo, menos ‘viejo’ y propinó una golpiza épica y de nivel al joven Santillan, quien en más de una ocasión en la pelea, lució mal y se vio en grandes aprietos.
“Mi preparación fue de 3 semanas y esto no es para hacer menos a Santillan ni a nadie, yo respeto, pero te estoy diciendo la verdad; 3 semanas nada más. Pero la clave de mi preparación fue que tuve mucha Fe y Dios me regresó el hambre y el amor por este hermoso deporte”.
El resultado final fue una injusta victoria para Giovani por la vía de la decisión mayoritaria (94-96 x2 y 95-95). DeMarco demostró que está para grandes peleas, oportunidades serias y reales, y por supuesto no permitirá que los jueces le vuelvan a robar.
En exclusiva para El Virus del Boxeo, ‘Tony’ compartió con nosotros, sus impresiones de su último combate y además habló sobre planes a futuro.
“Te puedo decir que siento que gane claramente la pelea, me sentí renovado, joven y con todas mis facultades bien Gracias a Dios y lo demostré no en 1 o 2 rounds, lo demostré durante 10 rounds con un muchacho invicto, fuerte, sólido e hice ver fácil mi pelea. Todo eso es gracias a Dios por la experiencia y mis facultades que están bien.”
A pesar de la derrota, DeMarco fue visto como el claro ganador y esta actuación de manera casi asegurada, le brindará la oportunidad de pelear en otra importante cartelera y ¿por qué no? quizás el poder disputar un campeonato mundial más temprano que tarde.
“Mi meta ahora es bajar a 140 libras y ser CAMPEÓN MUNDIAL…. Suena loco verdad pero así será primero Dios”.
“Todo se lo entregue a Dios y el sabrá lo que sigue, solo Dios sabe pero creo que Dios me está enviando un mensaje, diciéndome que continúe que lo puedo volver a hacer, y todos los incrédulos comenzarán a creer Amén”.